Entrevistas

Creen en los libros: Entrevista a Guillermo Quijas-Corzo y Vania Reséndiz, fundadores de Almadía

Paulina Retamales Por Paulina Retamales

Son creadores de esta editorial oaxaqueña que nos encanta y, año tras año, anfitriones de una de las mejores ferias del libro que se realizan en México. Invitados de todo el mundo vuelan hasta la bella Oaxaca para hablar de sus creaciones y disfrutar de la calidez con que reciben Guillermo, Vania y el equipo...

Son creadores de esta editorial oaxaqueña que nos encanta y, año tras año, anfitriones de una de las mejores ferias del libro que se realizan en México. Invitados de todo el mundo vuelan hasta la bella Oaxaca para hablar de sus creaciones y disfrutar de la calidez con que reciben Guillermo, Vania y el equipo que organiza la Feria del Libro de Oaxaca, FILO. Hoy, cuando cumplen doce años de la creación de Almadía, conversamos sobre los desafíos que deben afrontar en la madurez de este proyecto editorial.

Almadía

Guillermo Quijas-Corzo y Vania Reséndiz. Créditos: Almadía

Temo no ser objetiva al contar esta historia —es mejor advertirlo desde el principio— soy muy fan de la editorial mexicana Almadía y de la hermosa pareja que le da vida: Guillermo Quijas-Corzo y Vania Reséndiz, los protagonistas de esta nota. No voy a escatimar en piropos, pero también creo que al finalizar la lectura de esta entrevista, coincidirán conmigo en que el trabajo que han hecho por la literatura latinoamericana y en especial por la cultura de Oaxaca, es digno de reconocer. Y quizás no me equivoque al pensar que una vez les conozcan mejor, ustedes también se convertirán en verdaderos fanáticos.

Almadía cumplió doce años de vida de edición inteligente y amable a la vista, como la describiría el escritor Jorge F. Hernández, en su columna de El País, haciendo referencia a los 300 libros que componen actualmente el catálogo de esta editorial mexicana, a la que más que “independiente” le gusta ser reconocida como editorial oaxaqueña, cuyos autores son principalmente latinoamericanos y mexicanos repartidos en colecciones de poesía, narrativa, ensayo, cuadernos de viaje e ilustración. Unos libros que atraen inevitablemente la mirada de los lectores, en los mesones de las librerías, gracias a sus peculiares tapas dobles diseñadas por otro integrante relevante de la editorial: el ilustrador Alejandro Magallanes.

— ¿Cómo recuerdan los comienzos de Almadía?

—Guillermo: Casi desde que empecé a trabajar en la librería y papelería de mi abuelo, Proveedora Escolar, hace ya 15 años, había una inquietud por continuar publicando libros. Mi abuelo, Ventura López Sánchez, fue profesor indígena mixteco y fundador en 1974 de la Unión de Libreros de Oaxaca. Después de ser cesado del magisterio por ser comunista, reunió su cheque de liquidación con el de otros profesores y entre todos fundaron la Proveedora Escolar. Él ya editaba libros, desde la librería.

Cuando me hice cargo, lo único que hicimos diferente fue buscar un perfil muy claro para la editorial y que tuviera una distribución más amplia. En el 2005, fundamos la Editorial Almadía con la intención de apostar por nuevos autores y propuestas literarias, de publicar los géneros desdeñados por el circuito comercial y de incentivar nuevos círculos de lectores, y escogimos el género de literatura porque es lo que nos gustaba.

Aljandro Magallanes BID

Diseño de Alejandro Magallanes, para Almadía. Créditos: BID

Y les sigue gustando. Pocas editoriales independientes latinoamericanas pueden lucir un catálogo internacional tan nutrido como el de Almadía, por el que ya han pasado Enrique Vila-Matas, Ramón Caride, Lolita Bosch, de España; Sofi Oksanen (Finlandia); Mia Couto (Mozambique); Rodrigo Rey Rosa (Guatemala); Santiago Gamboa, Alberto Salcedo Ramos, Emma Reyes, de Colombia; Eric Nepomuceno, Joca Reiners Terron, de Brasil; Rivka Galchen (Canadá); Stefan Kiesbye (Alemania); Goncalo M. Tavares, Ondjaki, José Eduardo Agualusa , de Angola; Henrietta Rose-Innes (Sudáfrica); Mónica Maristain, Fabián Casas, Alberto Manguel, Martín Caparrós, Andrés Neuman, Olverio Coelho y Samanta Schewblin, de Argentina; y J.M.G. Le Clézio, Camille De Toledo y Éric Chevillard de Francia; Raúl Zurita, Alejandra Costamagna y Alberto Fuguet,  de Chile.

Si echamos un ojo a los números de venta llama la atención por sobre los otros, el libro de cuentos Los Culpables (2007), que ha vendido 40 mil ejemplares. El texto, firmado por otro clásico de la literatura mexicana como es Juan Villoro, es de lejos el más vendido del catálogo de la editorial oaxaqueña. Pero este éxito tiene una base sólida, y que se puede resumir en que Almadía y sus editores creen en los libros.

—¿Cómo surge el amor por los libros?

Vania: Creo que en ambos casos, nuestras familias siempre estuvieron cerca de los libros de una u otra manera. Además de que tuvieron relación de mucho tiempo atrás. Los libros y la lectura son algo con lo que crecimos y nuestras vidas al final nos llevaron a trabajar con ellos. No solo en su publicación, sino también en su difusión.

Alejandro Juan y Almadia

En marzo del años 2013, Almadía presentó la edición especial de «Los culpables», de Juan Villoro. En la imagen, el diseñador Alejandro Magallanes, el escritor Juan Villoro y el fundador de Almadía, Guillermo Quijas-Corzo. Créditos: Carina Pérez García.

La familia Almadía se expandió, llevando su pasión por los libros a la creación de una fundación, de una biblioteca en honor al abuelo Ventura y de una residencia para jóvenes escritores en Oaxaca.  Junto a Vania —y con el propósito de investigar, promover y difundir la literatura y promover la lectura— Guillermo constituyó la Fundación Ventura en 2004, institución que también es la organizadora de la Feria Internacional del Libro de Oaxaca (FILO), donde Chile fue país invitado de honor en 2016.

La FILO, como se le conoce por sus siglas, es considerada como uno de los encuentros literarios más importantes del país, gracias al desarrollo de un nutrido programa en torno a la lectura, convocando a escritores nacionales e internacionales, en una agenda que abarca más de 150 eventos gratuitos en diferentes y emblemáticos edificios del centro histórico de la ciudad, en los que también tiene cabida la música, la gastronomía y las expresiones artísticas.

Es precisamente durante la FILO cuando se da a conocer el ganador de la Residencia Ventura, una beca que busca “brindar a los escritores las condiciones necesarias para que puedan dedicar tiempo completo a la producción de una obra, conocer proyectos literarios alrededor del mundo y generar una dinámica de colaboración cultural entre los escritores invitados y los creadores locales”.

Diana del angel Ciudadania Express

La poeta, ensayista y defensora de derechos humanos, Diana del Ángel, resultó ganadora de la Primera Residencia de Creación Literaria Ventura+Almadía con la obra “Procesos de la noche”. Fuente: Página 3. Créditos: Ciudadanía Express.

Como lo que se hereda no se hurta, Guillermo Quijas (México, 1982), quien nació en el seno de una familia dedicada a la venta de libros y que poseía también una papelería —aún en funcionamiento, en pleno centro de Oaxaca— no ha hecho más que continuar y hacer prosperar la herencia familiar: “solo le estamos dando continuidad a algo en lo cual creemos y queremos profundamente”, dice Vania. En 2002, con 20 años de edad, Guillermo quedó al frente del negocio de su abuelo como gerente general y con el paso del tiempo fue el encargado de ampliar y modernizar la empresa. Doce años después, Proveedora Escolar, la librería, cuenta con siete sucursales en la capital del Estado de Oaxaca y una más en la ciudad de Puebla, lo que les permite comercializar los libros de Almadía y otros sellos que la editorial representa en México, y asegurarse que la distribución de los mismos sea efectiva.

—¿Cómo ha cambiado el catálogo y el equipo detrás de Almadía en los últimos años?

—Guillermo: Creo que el perfil del catálogo es el mismo. Nos basamos mucho en buscar libros que nos gustan, en diversos géneros y países. Estamos muy centrados en un catálogo latinoamericano. En un principio arrancamos solo con tres colecciones: narrativa, ensayo y poesía, y hemos abierto una de dibujo e ilustración, clásicos de viaje y crónicas en los últimos años.

En lo que respecta al equipo de Almadía, Guillermo dice que “este se ha mantenido durante los últimos años, y creo que eso es bien importante para poder conseguir mejores resultados.”

Esa fuerza que da la relación de amistad entre quienes trabajan de forma cercana a Guillermo y Vania, y la trayectoria conjunta del equipo es evidente cuando se les conoce de cerca y en terreno. La Feria del Libro de Oaxaca, por ejemplo, con más de 100 mil visitantes, más de 200 invitados nacionales e internacionales y 300 actividades, es una de las fiestas anuales de la editorial y del pueblo oaxaqueño.

Es la prueba fehaciente que existe una familia Almadía, compuesta por compañeros de trabajo, amigos de juventud y profesionales de primera que se mezclan en este equipo que comparte la visión y la pasión de una pareja reconocida por todos como entrañable y generosa. Esa pasión por los libros contagia y consigue convocar a grandes talentos cada noviembre en Oaxaca, una bella ciudad que está a una hora y media de vuelo desde Ciudad de México, por el solo hecho de vivir la experiencia FILO.

Es así como consiguen que Elena Poniatowska y Margo Glanz conversen animadamente a la hora de almuerzo con Juan Villoro y Paco Goldman; que “El negro” —insigne fotógrafo de la FILO— retrate a Raúl Zurita, Alejandro Zambra y a Valeria Luiselli; que por la noche Martín Caparrós se cruce con Edmundo Paz Soldán, Tedi López Mills, Antonio Ortuño, Santiago Roncagliolo, Magela Baudoin, John Irving, Mario Bellatín, Jorge Volpi, Álvaro Enrigue y Guadalupe Nettel. Y todos quieren (queremos) repetir.

— ¿Cuál fue la herencia literaria que dejó la delegación chilena en los lectores oaxaqueños?

— Guillermo:  ¡Creo que la participación de Chile en Oaxaca fue increíble! Además de ser una de las más grandes con las que ha contado la FILO, creo que todos los asistentes se comprometieron con sus actividades y de verdad intentaron mostrarles su trabajo a los lectores oaxaqueños y dejarles algo, con total franqueza. Eso siempre se agradece.

El año pasado la feria estuvo centrada en la Memoria, y participaron una treintena de autores y editores nacionales, además de un flamante Raúl Zurita, como el gran homenajeado chileno. Este año, el tema central será Frontera y Migración, puntos que serán abordados desde la óptica social, como antropológica y política, pero también artística, aludiendo a las fronteras entre los diversos géneros y las migraciones que se dan entre uno y otro

Y parece ser pertinente hablar de migraciones, no solo por el contexto político en todo el mundo, sino porque los mismos libros de Almadía tras 12 años de vida comienzan a viajar, traspasar fronteras, vendiéndose actualmente en todo México, Chile, Colombia, Argentina, Perú, Costa Rica, Ecuador, Centroamérica, España y California.

—¿Cuál son los problemas que encuentran en la circulación de libros en Latinoamérica?

— Guillermo: Son muchos temas, puntos que tenemos en común quienes intentamos que el libro en América Latina circule. Sin duda las distancias y los costos de importación son un problema. La cantidad de puntos de venta en los diversos países, la posibilidad de reposición de los libros de manera efectiva, y la promoción a distancia puede generar todo tipo de complicaciones que haga que los libros lleguen a cuenta gotas o no lleguen.

HOMENAJE-A-RAUL-ZURITA-15-1024x682 Oaxaca media

Homenaje al poeta Raúl Zurita, en la Feria del LIbro de Oaxaca (México). Créditos: Oaxaca med

—Si pudiesen pedir un deseo, ¿a qué autor desearían publicar?

— Ambos: ¡Son tantos!, pero por nombrar algunos: Ibargüengoitia, Jack London, Herman Melville, Martín Luis Guzmán.

—¿Qué libro están leyendo ahora?

—Guillermo: Rey de Picas, de Joyce Carol Oates

—Vania: Tijuana: Migración y memoria, de varios autores

Por último, haciendo el paralelo con la edad de los humanos, Almadía estaría entrando en la adolescencia. ¿Cómo se ven de adultos?¿Cuál es la proyección a diez años más?

—Vania: Estos primeros diez años para Almadía han sido muy importantes. Creo que el momento de ser novedad ha terminado, y debemos mantener un buen catálogo y llegar a más lectores. A largo plazo, queremos seguir siendo lo que somos hoy: una editorial que apuesta por el cuidado en cada uno de los procesos de la edición, comercialización y venta de libros. Llegar a más lectores, en más países, y en la plataforma que sea.

Compartir en: Facebook Twitter
Paulina Retamales

Periodista de la Universidad de Viña del Mar. Gran parte de su vida la vivió en España, en donde se graduó en las universidades Autónoma de Barcelona y Oberta de Catalunya. Encontró su pasión por los libros y el mundo de la edición dirigiendo la FILSA de Santiago. Cofundadora de la Corporación del Libro y la Lectura, en los últimos años dirigió la editorial Vicens Vives Chile. Actualmente es docente del Diplomado de Cultura escrita y fomento lector de la Universidad Adolfo Ibáñez.

También te podría interesar