g
Reportajes

Ruta por las librerías de Edimburgo

Francisca Tapia Por Francisca Tapia

Varios pisos con novedades bibliográficas, estanterías repletas de la mejor selección literaria o estrechos locales de segunda mano plagados de encanto, la capital de Escocia tiene un lugar para cada tipo de lector. Nuestra colaboradora Francisca Tapia nos invita a recorrer las calles de Edimburgo y detenernos en algunas de sus inolvidables librerías. Es fácil...

Varios pisos con novedades bibliográficas, estanterías repletas de la mejor selección literaria o estrechos locales de segunda mano plagados de encanto, la capital de Escocia tiene un lugar para cada tipo de lector. Nuestra colaboradora Francisca Tapia nos invita a recorrer las calles de Edimburgo y detenernos en algunas de sus inolvidables librerías.

Calles del Old Town. Créditos: Francisca Tapia

Es fácil enamorarse de Edimburgo. Su imponente castillo en lo alto de la ciudad, el eco de las highlands en las verdes colinas que corona Arthur’s seat, las historias que resguardan los callejones de la tradicional Ciudad Vieja (Old Town), las impresionantes vistas desde Calton Hill o las coloridas fachadas de los negocios de Victoria Street. Excusas sobran, pero para quienes disfrutamos de los libros y la lectura, resulta de particular interés el título que le dio la Unesco en 2004 de Ciudad de la Literatura que, tal como conté en la nota Un paseo literario por la capital de Escocia, se refleja en los festivales, museos, monumentos y sinfín de referencias vinculadas al mundo literario presentes en sus calles. Junto con ello está la característica más lógica que podríamos esperar de una ciudad literaria: innumerables librerías a disposición de habitantes y turistas.

En mi visita a la capital del país del whisky, las gaitas y los hombres en kilt, tuve cinco semanas para recorrer sus calles e ingresar a cuanto local de venta de libros viera en el camino. De lo que pude conocer, destaco mis cuatro favoritos, esos que incluiría en una larga lista de excusas para viajar por primera vez (o segunda, o tercera…) a Edimburgo.

Explorando la Ciudad Nueva

Aunque es conocida como la parte nueva de Edimburgo, el New Town de la capital data de finales del siglo XVIII y, al igual que el tradicional Old Town, fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1995. Si bien las rutas turísticas suelen inclinar la balanza hacia el sector antiguo y su planta medieval llena de leyendas, el sector “nuevo” de Edimburgo también tiene mucho por ofrecer.

Desde la Estación de Waverley en pleno centro de Edimburgo, accederemos a Princes Street, una de las avenidas principales de la Ciudad Nueva, bordeada por enormes jardines que son frontera entre los dos sectores de la capital. Al avanzar en medio del comercio establecido es fácil encontrar el primer refugio literario que vi al llegar: Waterstones, librería que forma parte de una gran cadena de sucursales de Reino Unido.

Victoria. Créditos: Francisca Tapia

Admito que estaba reticente a considerar una librería perteneciente a una cadena por sobre aquellas independientes, pero el lugar tuvo suficientes méritos para convencerme de entrar cada vez que pude durante ese mes. Si bien las colecciones son casi idénticas al resto de las Waterstones, el edificio ofrece un encanto especial, con unas increíbles escaleras que conectan los cuatro pisos de libros e incluyen una cafetería con privilegiada vista hacia el Castillo de Edimburgo; una postal típica e inolvidable de esta ciudad.

Celebro también la buena atención de todos quienes atienden el local, además de los comentarios y observaciones sobre los libros que el equipo deja entre las estanterías, dándonos una pequeña guía para escoger nuestra próxima lectura. Entré a otros locales de Waterstones en Escocia, pero no los incluiría entre mis preferidos, me detengo en este local en particular porque me pareció un panorama perfecto para disfrutar en pleno centro de la ciudad de un espacio cómodo, calefaccionado, repleto de libros y con inigualables vistas.

Ya saliendo de la sucursal de Waterstones podemos dejar atrás Princes Street y avanzar por las elegantes calles de la Ciudad Nueva para trasladarnos hasta el barrio de Stockbridge, un sector con numerosos locales de comida, tiendas de segunda mano vinculadas a caridad, galerías de arte y un pequeño mercado con artesanías y productos frescos que degustar. En esta zona se localiza además una de las librerías más acogedoras a las que pude ingresar en la ciudad: Golden Hare Books.

En Golden Hare nunca se entra dos veces a la misma librería.

Fácilmente distinguible por su fachada azul en la que reluce un conejo dorado, esta librería independiente crea un hábitat cómodo para los lectores, con una chimenea en el centro de su habitación principal y espacios donde sentarse a leer. Al fondo se localiza un sector dedicado exclusivamente a la colección infantil/juvenil, con títulos destacados cada semana para orientar a los visitantes y sectores acondicionados para que los lectores más pequeños puedan hojear sin apuro los libros disponibles.

Mientras Waterstones me conquistaba por variedad y cantidad, en un amplio recinto por el cual uno podía felizmente perderse por horas, Golden Hare apostaba a una colección más acotada y cuidadosamente escogida: no vi ediciones de mala calidad o títulos de relleno, y a primera vista todo me pareció seleccionado con esmero y conocimiento. Esta apreciación la corroboré tiempo después leyendo los comentarios de una de las encargadas del local, quien afirmó que precisamente se establecieron con la premisa de hacer de su lugar una “celebración del libro como objeto físico”, por tanto su política es mantener una colección que cambia regularmente y que siempre pone a disposición de sus clientes libros que sean hermosos, por dentro y por fuera. En Golden Hare nunca se entra dos veces a la misma librería.

La famosa Ciudad Vieja

Si volvemos tras nuestros pasos desde Stockbridge y nos situamos en la gran Princes Street, podremos localizar los puentes que conectan los dos sectores de Edimburgo y fácilmente daremos con la avenida principal, la concurrida Royal Mile. Esta calle, dividida en seis zonas, se extiende desde el Castillo de Edimburgo hasta el Palacio de Holyrood, residencia oficial de la reina Isabel II a la cual suele trasladarse en temporada de verano.

Saliendo de la Royal Mile en dirección al cementerio de Greyfriars muy cerca de la estatua del popular terrier Bobby que da la bienvenida al camposanto (un pequeño perro que podríamos considerar como el Hachiko escocés), descubriremos en Candlemaker Row, el sencillo hogar de Transreal Fiction. A diferencia de los locales que mencioné anteriormente, esta librería es mucho más austera en espacios y decoración, y se avoca a un nicho en particular: ciencia ficción y fantasía, tanto en formato de novela como en literatura gráfica. Aquí es posible encontrar desde lo más clásico, hasta las ediciones más recientes de estos géneros. De hecho, según leí tiempo atrás, Transreal tendría la mayor gama de obras importadas de ciencia ficción y fantasía en Escocia, además de contar con la invaluable ayuda de su dueño, Mike Calder, si necesitas alguna recomendación u orientación en la búsqueda de material.

Transreal Fiction. Créditos: Francisca Tapia

No muy lejos de Transreal, podemos avanzar hasta Grassmarket. Siglos atrás en esta zona se realizaron ejecuciones públicas, se cometieron famosos crímenes y se protagonizaron numerosos disturbios, sin embargo, hoy en día nos encontramos con un animado sector lleno de pubs y restaurantes. Si avanzamos hasta la calle West Port además veremos pequeños locales que ofrecen libros de segunda mano a bajos precios.

Cabe señalar que en Escocia en general es muy fácil encontrar negocios de este tipo, algunos pertenecen a cadenas como las famosas Oxfam  –cuyos fondos van a causas humanitarias–, y otros son establecimientos que funcionan de forma independiente. Mi favorito de este sector es Armchair Books, un local que es fácil pasar por alto si no vas de sobre aviso o con ganas de curiosear esta zona. Sin embargo, una vez ingresas, sabrás que fácilmente se ganará un espacio en el corazón de cualquier ávido lector. Los libros lo cubren todo, en un circuito estrecho de estanterías que no puedes dejar de mirar y que te ofrecerá variedad de títulos en perfecto estado y a buenos precios. Como referencia: obras de Margaret Atwood a 4 libras ($ 3.300 aprox.), ediciones completas de El señor de los anillos desde 7 libras ($ 5.800 aprox.), una hermosa colección con los siete libros de Las crónicas de Narnia a 35 libras ($ 29.000 aprox.), Donde viven los monstruos a 3 libras ($2.200 aprox.). Destaca también una gran colección de libros antiguos, eso sí, es necesario recorrer con paciencia las pobladas estanterías para ver qué tesoro literario puedes descubrir.

Si aún queda presupuesto y espacio en la maleta, hay varias librerías de segunda mano para visitar en el mismo sector, o también se puede volver hasta los límites de la Ciudad Vieja, cerca de la Estación de Waverley, donde se encuentra el llamativo Fruitmarket, galería de arte contemporáneo a la que se puede acceder gratuitamente, y por supuesto, recorrer su sector de librería también. De todas maneras, mi opción favorita sería ir en búsqueda de inspiración literaria al Elephant House. En esta cafetería la conocida escritora británica J. K. Rowling comenzó a escribir su famosa saga Harry Potter y, pese a que en el local no hay muchas referencias al niño mago, sirven un estupendo kuchen de manzana para acompañar con una taza de té o un confortable chocolate caliente. Para mí, el cierre ideal tras una tarde de paseo por las librerías de Edimburgo.

Armchair Books. Créditos: Francisca Tapia

 

 

 

Compartir en: Facebook Twitter
Francisca Tapia

Periodista diplomada en Literatura infantil y juvenil de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Ha colaborado en medios de comunicación e instituciones de educación y cultura. A través de entrevistas, reseñas y su pequeña librería online comparte el amor por la lectura.

También te podría interesar